A la vuelta del trabajo
Pequeños en la esquina
mi mujer y mis hijos.
Yo avanzo y ellos crecen,
a ellos me aproximo
y se vacía el mundo
que arrastro con mi sombra.
En ellos me reúno
por ver cómo ha sido
el día verdadero,
y cuánto al extrañarme
apuntalan mis huesos.
En ellos verifico
la altura de los árboles,
el perfume del día,
la canción de las rosas
y aquello que trataba
de un mundo que aún guarece
sabor a hecho cierto.
Roberto Malatesta-