13 de febrero de 2008

small logo

Inmutable voy

Peregrinaje al centro del pensamiento
Descalzo de razón
Apesadumbrado de elogios
Vuelvo a la raíz agnóstica
Que nutre mi perpleja nausea.
A lo lejos
Visualizo encontrarte
Cabalgando una mi nube del infierno
Descubres el sigiloso filo
Que atraviesa tu delgada nada.
Allá... el vuelo dorado de nuestros días
Anclados en cotidianos encuentros
Amusgados en tortuosos calvarios.
Nada nos responde
A nuestro peregrinaje
Nada se responde
Al tiempo enclaustrado.
Aletargado de tormentos
Y pulcro de trivialidades.
Ahora, deja mi nube
Para lamer el suelo inerte
De parajes absurdos
Y recoge tu razón
Para descubrirla
Entre tantos dotes
Que es...
 nuestra propia soledad.

                Mauro González Quarti-

cronicaliteraria@yahoo.com.ar | 2001-2008 Crónica Literaria - Comodoro Rivadavia - Chubut - Argentina