Te autorizo
Te autorizo a gritar, romper papeles, patalear
por un trozo de esperanza, subirte a una silla
y proclamar tu autonomía, bajarte después y
decirme no ha sido suficiente esa osadía
Te autorizo a reírte de las cosas, que pueden
ahora atenazarte, a burlarte conmigo del
detalle de sabernos unos mas en el desastre
vital de una tristeza que nunca expira
Te autorizo a la ira, al coraje mundano y
repetido, a dormir sin la trinchera de los
sueños, a dejar de respirar por un momento,
o a decirme que todo esta perdido
mas, no me destierres de tu sino y de tu paso,
no me condenes por favor a lejanía y ocaso
por amistad, hazme parte ahora de tu vida
y dame un sitio para curar tu herida.
Rebeca Montañez