Giros (al Tigre Millán)
Gira y gira,
como en una calesita
el dolor desgarrado
de la música de un tango,
que entre cortes y quebradas
se engancha en el borde desigual
de una nube viajera,
que oscurece la luna
esta noche de barrios.
Conventillos, minardas.
malevaje y tragos,
tacos altos,
medias “finas”,
facones al costado,
y los dedos volando
desangrando teclados.
Incrustada en tu cuerpo,
entregada a los giros
que me indican tus manos,
en total armonía
me deslizo insinuante
transformada en tigresa,
adosada a tus muslos,
atrapada en tu abrazo.
Giro y giras,
madreselva y muro
en entrega profunda,
amantes desgraciados,
acoplados en uno
bajo el cielo estrellado,
mientras en el aire vibran
acordeones y pianos,
y una voz que en su canto,
desde el alma dedica,
las palabras de un tango,
para el guapo entre guapos.
María Magdalena Gaveta-